pero estoy sola, no hay manos que me sostengan. aquellas que sé se ofrecerían sin dudarlo no son tan fuertes como para sostenerme sin caerse conmigo y no quiero que nadie lo haga. si voy a hundirme lo haré sola, nadie merece hacerse cargo de lo que me pasa o de los recuerdos que me invaden. debo ser fuerte, afrontar lo que me toque, ser artífice de mi destino e intentar por lo menos que quienes sufrieron conmigo no vuelvan a saber de mi dolor.